viernes, 11 de marzo de 2016

La muerte del Partido Republicano

El 3 de marzo creo que fue el final del Partido Republicano de USA tal y como lo conocemos. Los tres candidatos que están a punto de ser derrotados por el desquiciado Donald Trump reconocieron en un debate televisivo que apoyarían la candidatura de Trump si finalmente se convertía en el candidato del partido. Ni en los años 60 con Goldwater ni en los 80 con Reagan se alcanzaron niveles tan extremos de filofascismo por un candidato, ni de claudicación por una estructura de partido tradicional.

La principal víctima de esta situación no es precisamente la izquierda demócrata. El Partido Demócrata se sitúa en la centralidad ahora, permitiéndose incluso un resurgir del socialismo del medio-oeste en la figura de Bern Sanders (contrafigura de la centrista Hillary Clinton).

La víctima real del auge de Trump es el pensamiento conservador, que se queda huérfano de organización política que lo represente.

Cuando Leo Strauss estableció un puente entre la filosofía greco-romana y el cristianismo, sentó las bases del pensamiento occidental. Su ideal de virtud como el reconocimiento de nuestros deberes con la comunidad, cumpliendo con ellos a través del servicio a los demás, cimentó la base de un pensamiento que se oponía igualmente al relativismo y a los experimentos utópicos. Donald Trump representa justo todo lo contrario.

Trump es relativismo puro: todos los buenos valores se olvidan si está en juego el interés. Trump es utopía (que puede convertirse fácilmente en distopía): soluciones mágicas y expeditivas para todo.

En el verano de 1968 el gran Johnny Cash hizo campaña en favor del republicanoWinthrop Rockefeller para gobernador de Arkansas. Mejores carreteras, mejor educación y una reforma del corrupto sistema de prisiones. Ésos eran los tres ejes de un programa social que hubiese firmado cualquier reformador a la derecha o a la izquierda. El "hombre de negro" se comprometió con un Rockefeller que a la vez estaba comprometido con la sociedad de su tiempo y con el bienestar de todos sus vecinos.

Hoy Johnny Cash creo que añadiría unos versos a su canción "Man in black":

"Voy de negro por la muerte del Partido Republicano / y todo lo bueno que representó en el pasado".