domingo, 30 de junio de 2013

Sinatra Forever

Se cumplen 70 años del inicio de la carrera de Frank Sinatra como solista. En el mes de junio de 1943 se encerró en un estudio para registrar sus primeras grabaciones en solitario.

Nunca me enseñaron a apreciar la música, ni académica ni emocionalmente.

En la escuela no sólo era una asignatura "maría" sino soporífera en grado sumo. En mi casa, la única canción que recuerdo escuchar en la radio de mi infancia era la intro al programa de la señora Francis...

Teníamos un tocadiscos de mi abuelo y ahí empecé a formarme mi propia culturilla musical con lo que iba pillando de su colección de discos.

El primer cassette que me compré fue uno de Ray Charles. Como no teníamos en casa radiocassette me iba a escucharlo al coche de mi padre, un flamante Simca 1200 con radiocassette incluído.

Desde siempre me gustó Sinatra.

En primer lugar, porque era la única persona a la que entendía cantando en inglés. Claro, no lo entendía todo pero casi todo, en serio.

En segundo, Sinatra parecía cantar de cosas que conocía, que había vivido. Eso me impresionaba.

Por último, cuando crecí y conocí más su amplia discografía vi que era el mejor compañero para la aventura de la vida: siempre es posible encontrar una canción suya para cada momento.

En junio y en julio siempre me acuerdo de That's Life.

Acabo el curso escolar como profesor exprimiendo al máximo las horas, entregándome para que mis alumnos aprueben y pasen de curso. En lo más alto.

Acaba junio y llega el verano. ¿Qué encontraré que me motive ahora que julio está a las puertas? ¿Cómo será el próximo curso, traerá nuevos retos?

Bueno, si he de decir la verdad, me podría pasar el verano escuchando a Sinatra. Incluso me podría pasar el curso escuchándolo.

Si hubiese oposiciones a un oficio llamado "oyente de Sinatra", desde ya me pondría a hincar los codos :-)
      
     

miércoles, 26 de junio de 2013

Sonrisa scout

¿Porqué un movimiento como el scout ha perdurado con creciente vitalidad iniciando ya su segundo siglo de vida?

Creo que ha sido gracias a una mezcla de tradición y progreso.

Los scouts han creado sus propias tradiciones. Se han aferrado a una Ley y una Promesa para guiarles en su propósito de ser buenos ciudadanos y mejores personas. Lo han hecho con los pies en el suelo, en contacto con la naturaleza, sin dejar de jugar y disfrutar de la vida. 

A la vez, como buenos pioneros, han ido avanzando en el camino, haciendo progresar con ellos a sus comunidades. Sirviendo a todos, han servido a la causa de la Justicia y han capacitado a los jóvenes para ser protagonistas de su propia vida y defensores de los derechos de todos, especialmente de los más débiles.

En todo eso estaba pensando cuando me levantaba deslomado, con más sueño aún del que tenía al acostarme, después de otra noche de dormir en tienda de campaña con mis hijas y mis hermanos scouts. 

- ¡Buenos días Rafa! - me dijo un despeinado y soñoliento scout, con una sonrisa de oreja a oreja.

Y supe que la intuición de Baden Powell había sido cierta. Si vale le pena no será fácil, pero cualquier dificultad puede atacarse y vencerse con una sonrisa.

Un día más en el campamento scout; aprendiendo unos de otros. 




viernes, 21 de junio de 2013

Servidumbres geoestratégicas

El siempre polémico Pedro J. ha recibido recientemente el Premio de la Fundación Dwight D. Eisenhower en USA.

No cabe duda que el general fue un gran defensor de las libertades. Yo mismo soy un gran admirador suyo. Liberó a Europa del nazismo, defendió el derecho de la población negra de USA a educarse en centros escolares integrados y se opuso a la paranoia macarthista.

Sin embargo al enfrentarse al totalitarismo soviético dio oxígeno, por motivos geoestratégicos, a la dictadura de Franco. Oxígeno, mantequilla, leche en polvo...

Pedro J. en su discurso de aceptación del premio describe este hecho como un primer paso en la liberalización del régimen. El apoyo de Eisenhower a Franco y la entrada de España en la ONU son para Pedro J. casi el inicio de la recuperación de nuestras libertades... 

No puedo evitar pensar en la soledad de un veterinario de prestigio, gran intelectual y mejor persona, D. Félix Gordón Ordás. 

En esa década de los 50 era el presidente del Gobierno de la República en el exilio. 

Nunca pudo volver a su amado León. 

Hombre de familia muy humilde, sus proyectos para abordar modernamente la problemática de la ganadería en España habían causado burlas en sus compañeros de gabinete (personas elitistas, desconocedoras de los problemas del campo). 

Profundamente espiritual, le tocó lidiar con una Iglesia católica que le caricaturizó como un contumaz ateo, cuando no lo era en absoluto, por su defensa de la laicidad del Estado.

Ideológicamente siempre fue fiel a un liberalismo avanzado, de progreso (el del Partido Republicano Radical Socialista que él mismo contribuyó a fundar).

Hablaba ayer con un amigo sobre el fracaso de las experiencias del liberalismo organizado en España. 

Entre los países mediterráneos sólo Italia pudo articular un liberalismo (en versión La Malfa, Panella o Bonino) con cierta relevancia y continuidad. Pero el radicalismo de los años 30 en Francia, España o Portugal desapareció casi sin dejar rastro tras la II Guerra Mundial. 

Pensaba entonces en la soledad de este hombre, D. Félix, intentando defender la legitimidad democrática de una España que ya no existía. Defendiendo ideas de tolerancia y progreso para las que jamás se había creado sustrato alguno en el que pudieran alimentarse y crecer. Abogando por un enfoque racional de la crianza del ganado en un país de señoritos de derechas y de izquierdas que no se ensuciaban las botas. Un hombre íntegro cuyo único regalo oficial que aceptó en todo su ejercicio público fue un retrato de su esposa y cuyo sueldo político entregaba en secreto al Colegio de Huérfanos de Veterinarios. 

Y pensaba también en cuánto le hubiera gustado a Eisenhower haber estrechado la mano de D. Félix en lugar de tener que estrechársela al general Franco.

domingo, 9 de junio de 2013

The Artist

Una de las cosas que más respeto en la vida es el Arte.

Un compañero, reverendo anglicano como yo, tiene un hijo pintor ampliando estudios en Portugal.

Estuve interrogando al padre para saber de dónde le había nacido a su hijo la capacidad artística, si era algo heredado o inducido, pero no supo decirme.

Conocí siendo casi un niño a un muchacho que ahora está de gira por medio mundo, cantando con Paloma San Basilio. De pequeño era un pillastre simpaticón. Ahora es un actor completo: bailarín, cantante, intérprete... Un todo terreno.

He conocido a muchos otros artistas, especialmente en el mundo del circo, y siempre he caído rendido ante ese genio especial que tenían en común: el Arte.

¿Cómo logran expresarse con belleza y creatividad en medio de un mundo cada vez más pintado de gris?

¿Cómo logran comunicarnos emociones entre sonidos de cláxones ?

Me gustaría tener su genio, para saber decir las cosas como las canta Richard Marx.