Miedo y Libertad

Estaba comiendo como tantos días, con el televisor puesto y viendo los Simpsons. Claro que siempre tienen ocurrencias graciosas, pero esta frase me obligó a dejar la cuchara y escribirla en la servilleta de papel:  “¿Sabes que a diario se cuelan en nuestro país gays mexicanos y desconectan a mujeres en coma?” (Homer dixit).

Los miedos del americano medio acaban convirtiéndose muchas veces en miedos globales. No son inherentes al ser humano sino creados por quienes se esfuerzan en propagar el miedo como antesala del odio. Ocultan verdades mucho más terribles y bloquean la búsqueda de nuevas respuestas a los problemas reales.

Ahora que Wikileaks ha comenzado a destapar algunas de esas verdades, los mismos que extienden el miedo y el odio quieren ponerle una mordaza a la libertad de expresión.

Jesús de Nazaret nos enseñó que solamente la Verdad puede hacernos libres. Tenemos derecho a conocerla sin que las mentiras, el miedo, el odio o las mordazas nos lo impidan.